Neruda y Perlongher

Relaciones entre dos poemas de «Residencia en la tierra» y «Cadáveres».

En el libro de Pablo Neruda Residencia en la tierra (1935) hay dos poemas que contienen elementos que pueden vincularse con el poema «Cadáveres» (1984), de Néstor Perlongher.

Los poemas de Residencia en la tierra fueron escritos entre 1925 y 1935. La primera edición se publicó en 1933 (Editorial Nascimento) y la edición ampliada o completa, como la conocemos hoy, en 1935 (Ediciones del Árbol de la revista Cruz y Raya). El poema «Cadáveres» fue escrito «durante un largo viaje en micro de Buenos Aires a San Pablo en 1981» (Perlongher, 1997, p. 227) y fue publicado por primera vez en el número 1 de Revista de (poesía), en 1984.

En el poema titulado «Sólo la muerte» aparece, entre otras alusiones mortuorias, la expresión «hay cadáveres» y la repetición de «hay» a principio de verso:

Hay cadáveres,
hay pies de pegajosa losa fría,
hay la muerte en los huesos,
como un sonido puro,
como un ladrido sin perro,
saliendo de ciertas campanas, de ciertas tumbas,
creciendo en la humedad como el llanto o la lluvia.

En ese poema, puede leerse también la expresión «hay cementerios».

Unas páginas más adelante figura el poema «Alberto Rojas Giménez viene volando», cuyas estrofas están estructuradas de manera casi idéntica que las de «Cadáveres». El texto del argentino es mucho más extenso que el del chileno y en los dos poemas los recursos son muy similares. Una breve muestra de cada uno:

[Neruda]

Entre plumas que asustan, entre noches,
entre magnolias, entre telegramas,
entre el viento del Sur y el Oeste marino,
vienes volando.

Bajo las tumbas, bajo las cenizas,
bajo los caracoles congelados,
bajo las últimas aguas terrestres,
vienes volando.

[Perlongher]

Bajo las matas
En los pajonales
Sobre los puentes
En los canales
Hay Cadáveres

En la trilla de un tren que nunca se detiene
En la estela de un barco que naufraga
En una olilla, que se desvanece
En los muelles los apeaderos los trampolines                                                                /los malecones
Hay Cadáveres

En un artículo donde analiza el poema «Cadáveres», Alelí Jait afirma que el texto de Perlongher es una parodia del poema «Libertad» de Paul Eluard y señala similitudes compositivas, como el uso de la repetición de preposiciones en ambos textos y la repetición del mismo verso al final de cada estrofa. Veamos dos estrofas del poema de Eluard, incluido en el libro Poesía y verdad (1942).

Sobre mis cuadernos de escolar
Sobre mi pupitre y los árboles
Sobre la arena sobre la nieve
Escribo tu nombre

Sobre todas las páginas leídas
Sobre todas las páginas en blanco
Piedra sangre papel o ceniza
Escribo tu nombre

Sur mes cahiers d’écolier
Sur mon pupitre et les arbres
Sur le sable sur la neige

J’écris ton nom

Sur toutes les pages lues
Sur toutes les pages blanches
Pierre sang papier ou cendre
J’écris ton nom

Es cierto que se trata de una estructura estrófica bastante extendida en la poesía y más en letras de canciones o composiciones tradicionalmente líricas: las repeticiones de preposiciones al comienzo de cada verso y la repetición del mismo verso al final de cada estrofa dan musicalidad a los poemas. Y especialmente repiqueteo del último verso en cada estrofa opera de forma similar: vienes volando/ hay cadáveres/ escribo tu nombre.

Coincidencia, influencia, homenaje o parodia, debemos celebrar que poetas tan distintos e influyentes confluyan, donde suelen hacerlo los escritores, es decir, en la palabra y sus infinitas posibilidades.

Fuentes:

ELUARD, P. (1990). Poemas (1917-1952). Selección, versión y prólogo de Rafael Alberti y María Teresa León. Buenos Aires-Barcelona, Argonauta, p. 83.
JAIT, A. (2009). Poesía y dictadura. Análisis del poema «Cadáveres» de Néstor Perlongher. Buenos Aires. Recuperado de https://perio.unlp.edu.ar/ojs/index.php/question/article/view/718
NERUDA, P. Residencia en la tierra. Buenos Aires, Losada, 1958, p. 97 y p. 163-167.
PERLONGHER, N. (1997). «Cadáveres». En Prosa plebeya. Ensayos 1980-1992. Selección y prólogo de Christian Ferrer y Osvaldo Baigorria. Buenos Aires, Ediciones Colihue, Puñaladas-Ensayos de punta, p. 227-237.
PERLONGHER, N. (1997). Poemas completos (1980-1992). Edición y prólogo, Roberto Echavarren. Con una nota de Reinaldo Jiménez sobre Aguas aéreas y un epílogo de Tamara Kamenszain. Buenos Aires, Seix Barral, Biblioteca Breve, p. 109-123.
SZPUNBERG, A. (2008). Pablo Neruda. El rojo canto austral. Ilustraciones de Ricardo Ajler. Buenos Aires, Capital Intelectual, En pocas palabras…, p. 144.

Juan López, junio de 2020.
www.juanlopeztextos.com.ar